A una gran mayoría de gatos los caminos repentinos no les parecen para nada agradables, se estresan muy fácilmente y viajar conlleva un montón de cambios abruptos en muy poco tiempo y por mucho que quieras llevar a tu gato de paseo debes pensar si vale la pena someterlo a ese estrés, recuerda que siempre será mejor si tu gato cuenta con un GPS así si intenta escapar de su trasportín o arnés, sabrás donde encontrarlo
Si irás de viaje por algunos días la mejor opción es dejarlo en casa cubriendo sus necesidades o le puedes pedir a alguien que le eche un ojo cada tanto, pero si tu viaje es muy largo y no te queda más opción que llevarlo, prepara el mejor transportín porque aquí te daremos algunos consejos para que hagas esta experiencia agradable para tu peludo.
Viajes en coche

- Transportín: uno de los puntos más importantes antes de montar a tu peludo en un coche es encontrarle el trasportín adecuado, uno en el que se pueda mover y estirar a su antojo. También es muy importante que se acostumbre a él días antes del viaje, por lo que puedes ponerlo en la casa para que se vaya familiarizando. Evita los carritos para mascotas, aún si tu gato lo suele usar para paseos, puede ser incómodo moverlo de un lugar a otro, opta por el trasportin.
- Comida: no debes darle comida antes del viaje, alrededor de unos 3-4 horas, así evitarás que se maree. También cabe recordarte que le lleves agua fresca, su comedero, juguetes, etc. Al llegar al destino, dale una porción de comida, puede que no coma al instante, pero cuando se sienta seguro lo hará.
- Paradas: realiza paradas cortas cada 2 o 3 horas, al final tu gato se acostumbrará al viaje, pero puedes sacarlo del transportín unos minutos, darle agua y si llevas el arenero, dejar que lo use, nunca dejes al gato solo en el coche.
- Ruidos: tu gato ya de por sí estará estresado, evita la música fuerte o hablar muy alto. Esto ayudará a que esté calmado.
- Sedantes y feromonas: si gustas también puedes ir al veterinario y preguntar si es recomendable usar un sedante y que te de todas las recomendaciones. Otra opción es vaporizar tu auto con feromonas.
Viajes en avión
Aunque hoy en día es muy fácil viajar en avión con tu gato, la verdad es que no es muy recomendable viajar en avión con tu gato, deberías hacerlo solo en circunstancias que lo ameriten.
Como ya hemos dicho anteriormente, a la mayoría de los gatos no les gusta los cambios bruscos de ambiente y cualquier viaje en general puede resultarle muy estresante, por esto hay algunas recomendaciones que deberías tener en cuenta.

- Trasportín: lo principal es contactar a la aerolínea con antelación para conocer sus políticas acerca de las mascotas, puedes preguntar bajo qué circunstancias tu gato puede viajar en cabina dentro de un trasportín, pues es lo más recomendable.
- Reservas su espacio: las aerolíneas tienen un número limitado de mascotas permitidas por cada vuelo, por esto debes llamar con anterioridad.
- Bodega: puede que algunas aerolíneas solo tengan la opción de llevar a tu peludo en la bodega, esta es la menos recomendable pues puede estresarse y alterarse mucho.
Antes del vuelo:
- Veterinario: días antes del vuelo debes acudir a tu veterinario, el verificará que tu gato este en buenas condiciones para viajar y te dará un certificado donde dirá que cumple con las medidas sanitarias para el viaje. También deberás llevar la cartilla de vacunas.
- Comida: no es recomendable darle de comer a tu gato antes del vuelo, así evitarás que vomite o se maree, también debes acondicionar el trasportín para que pueda hacer sus necesidades, un tapete para mascotas puede ser suficiente.
- Arnés: si no está acostumbrado a usar un arnés para gatos, días antes del viaje puedes intentar ponérselo para que se sienta familiarizado. Es mejor tenerlo atado ya que en el aeropuerto deberás sacarlo del trasportín. No olvides su collar con su identificación.
- Hospedaje: al llegar al destino, lo mejor es ir directamente al lugar donde te quedarás, así tu gato podrá estar más cómodo.

No todos los gatos responden igual antes los viajes, pero recordemos que todo esto es por el bien de nuestros peludos, aunque pueda parecer mucho trabajo, si no tienes más opción que llevarlo contigo, lo mejor es hacerlo sentir lo más cómodo posible.